CulturaEducaciónHistoriaInterés General

Primeras médicas entrerrianas: Cecilia Grierson

 

El 2 de julio de 1889, Cecilia Grierson presentó su tesis en la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires, para consagrarse como primera mujer médica del país y podemos considerarla entrerriana porque, si bien, según algunas versiones, nació circunstancialmente en Buenos Aires, pasó la mayor parte de su niñez y juventud en la estancia de sus padres ubicada en el distrito Genacito, departamento Uruguay. Con Teresa Ratto, fueron las primeras médicas del país.

Cecilia Grierson nació el 22 de noviembre de 1859. Hija de colonos escoceses e irlandeses instalados en Entre Ríos, nacida en Buenos Aires según algunos testimonios, siendo niña vivió en la estancia de sus padres ubicada en el distrito Genacito, departamento Uruguay.
Era hija de los irlandeses Jane Duffy y John Parish Robertson Grierson, hijo del inmigrante escocés William Grierson (abuelo paterno de Cecilia), que se estableció en Argentina en 1825, para asentarse en Santa Catalina Monte Grande en la primera y única colonia escocesa en Argentina. La familia paterna fue una de las primeras que llegaron de Escocia al país. Fue la mayor de seis hermanos, una mujer llamada Catalina y los restantes fueron David, Juan, Tomás y Diego.
Una maestra precoz
A los seis años fue enviada a estudiar a Buenos Aires, cursó la primaria en colegios ingleses, y una vez finalizados sus estudios debió regresar a Entre Ríos por causa de la muerte de su padre. En ese momento, a pesar de su corta edad, comenzó a ayudar a su madre con el cuidado de sus hermanos. Y además se desempeñaba como institutriz en una casa de una familiar de buena posición económica lo que permitió ayudar aportando ingresos a la economía familiar. Y con sólo 13 años de edad instaló con su madre en una dependencia de la estancia de su fallecido padre una escuela donde ejerció la docencia durante tres años sin poseer título habilitante. En esa época era práctica habitual ante la escasez de profesionales en el ámbito rural. Como era menor de edad el sueldo lo cobraba su madre. En un documento de marzo de 1874 se informa la resolución por la cual el gobierno de Entre Ríos concede una subvención a la señora Juana D. de Grierson para instalar una escuela particular en el distrito Genacito(1). Un año más tarde empezó sus estudios formales como maestra de grado en la Escuela Normal de Señoritas de Buenos Aires fundada por Emma de Caprile, recibiéndose en 1878. Ya de pequeña mostró interés en ser docente como lo reflejó en una carta:
“…creo que nací para ser maestra, recuerdo algunas escenas desde los dos años de edad, donde siempre en mis juegos era una maestra…”.
Una vez obtenido el título, Domingo Faustino Sarmiento, por entonces Director de Escuelas, la nombra maestra en la Escuela Mixta de San Cristóbal, y con su sueldo traslada a su familia a Capital Federal.  Además integra el Consejo Nacional de Educación desde 1892 hasta 1899
En 1902 funda la Escuela de Economía doméstica y la Sociedad de Economía Doméstica, establecimiento precursor de la Escuela Técnica del Hogar, primera en el país en esa especialidad, promueve el estudio de la puericultura y es pionera en la enseñanza de ciegos, sordomudos y discapacitados.
La carrera de medicina
La enfermedad  de una querida amiga, Amelia Kenig que muere a raíz de una enfermedad respiratoria crónica, la decidió a lanzarse a otra aventura, la carrera de medicina. No debió ser nada fácil enfrentar los prejuicios para transformarse en la primera mujer en intentar convertirse en profesional del arte de curar. Pero coraje no le faltaba, tanto que fundó la Escuela de Enfermeras del Círculo Médico Argentino.
Uno de sus mayores aportes, hecho tempranamente desde su tesis de graduación, fue sobre la irritación o histeria en las mujeres recién operadas de ovarios. Al respecto un suelto publicado en el diario la Opinión de Entre Ríos en 1889, bajo el título “La primera doctora argentina”, anuncia de Cecilia acaba de terminar sus estudios de medicina. “Se llama Cecilia Grieson, tiene veinte y ocho años, natural de Entre Ríos. Acaba de terminar sus estudios en la facultad y pronto presentará su tesis (…).
“Este hecho, digno de registrarse porque es enteramente nuevo y altamente significativo. Como París tiene a las señoritas Scbultze y Evans, Buenos Aires tendrá a la señorita Grierson; aquellas no son las primeras doctoras francesas, pero ésta sí será la primera doctora argentina (…)
“Ha seguido sus estudios con notable aprovechamiento – continúa la nota -, obteniendo en los exámenes que acaba de rendir, en el primero cinco puntos y ocho en los otros dos. Actualmente ocupa el puesto de practicante mayor en el hospital de mujeres (…).
“Huérfana desde hace muchos años – destaca el diario -, entregada al trabajo y al estudio, ha venido siendo la providencia de sus hermanos, a quienes ha encarrilado y dirigido en la vida.”(2)
El 2 de julio de 1889 presentó su tesis titulada tituló Histero-ovarotomías ejecutadas en el Hospital de Mujeres, desde 1883 a 1889, a los 6 años de haber iniciado sus estudios médicos. Se convertía así en la primera mujer de Argentina y de América del Sur en obtener el título de médico. En 1897 ya había publicado Masaje práctico, uno de los primeros libros sobre técnicas kinesiólogicas.
Su valentía, inteligencia y capacidad de trabajo darían todavía muchos más frutos: desde su primer consultorio en el Hospital San Roque (hoy Hospital General de Agudos José María Ramos Mejía), su viaje oficial por Europa, la participación en la fundación del Instituto Argentino para Ciegos, la Primera Escuela de Enfermeras, la Asociación de Obstetricia Argentina y el Liceo de Señoritas, hasta la publicación de sus libros Educación Técnica para la Mujer y La educación del ciego y Cuidado del enfermo.
Un grupo de estudiantes disconformes, entre los que se encontraban José María Ramos Mejía y Juan B. Justo, por considerar a la carrera de medicina muy teórica y carente de prácticas creó el Círculo Médico en donde funcionó una escuela práctica de medicina con consultorios de especialidades varias y un centro dedicado a la difusión y a la investigación. En este establecimiento Grierson creó la primera Escuela de Enfermeras de América Latina con un plan de estudios formal y donde se estableció el uso de uniforme para las enfermeras y posteriormente fue adoptado por la mayoría los países latinoamericanos. Se desempeñó como directora hasta 1913.
La epidemia de cólera
A principios de abril de 1886 la ciudad de Buenos Aires tuvo una epidemia de cólera, la tercera del siglo, y todos los estudiantes de medicina fueron convocados a prestar servicios en Salud Pública. Cecilia Grierson fue destinada a la Casa de Aislamiento, uno de los lugares de atención y refugio para los pacientes de esta enfermedad que se tuvieron que improvisar a lo largo de la ciudad. Tuvo como grupo de trabajo a los doctores Penna y Estévez.
“Los días agotadores pasados en la casa de Aislamiento –relata en sus memorias- me hicieron concebir la idea de educar a enfermeras, puesto que no había quien respondiera a las necesidades de los enfermos. El mejor medio de proporcionar alivio a los que sufren es colocar a su lado personas comprensivas, afables y capacitadas que puedan colaborar con el médico en la lucha por recobrar la salud.
La epidemia se pudo controlar mermando los casos de afectados en abril de ese año, fecha en la que pudo retomar sus estudios.
La defensa de los derechos de la mujer
Su lucha por los derechos de las mujeres no se limitó al campo médico. En la primera década del siglo XX, extendió sus reclamos –desde las filas del Partido Socialista Argentino, fundado en 1896, junto a Alicia Moreau de Justo, Elvira Rawson y Julieta Lanteri-Renshaw-  a favor de los derechos civiles y políticos de las mujeres y participó de los primeros congresos feministas en el país. Grierson fue también pintora, escultora y buena deportista. Hacia el final de su vida residió en la ciudad cordobesa de Los Cocos, hasta que falleció el 10 de abril de 1934.
En sus memorias, la notable médica relata sus esfuerzos por insertarse en un mundo dominados por hombres. «Entre las muchas contrariedades sufridas en mi vida debo declarar que, siendo médica diplomada, intenté inútilmente ingresar al profesorado de la Facultad en la sección en que la enseñanza se hace sólo para mujeres (se refería, indudablemente, a la Escuela de Obstetricia). No era posible que a la primera mujer que tuvo la audacia de obtener en nuestro país el título de médica cirujana se le ofreciera la oportunidad de ser jefe de sala, directora de algún hospital, o se le diera un puesto de médica escolar o se le permitiera ser profesora de la universidad. Fue únicamente a causa de mi condición de mujer –según refieren oyentes y uno de los miembros de la mesa examinadora- que el jurado dio, en este concurso de competencia por examen, un extraño y único fallo: no conceder la cátedra ni a mí, ni a mi competidor… Las razones y los argumentos expuestos en esa ocasión llevarían un capítulo contra el feminismo, cuyas aspiraciones en el orden intelectual y económico he defendido siempre. Más tarde, en París, en la Clínica del Profesor Pinard, y dejando modestia aparte, me cercioré de que poseía la materia, y los elogios que me prodigaron sólo sirvieron para entristecer mi espíritu y convencerme una vez más de que a lo menos en lo que a las mujeres atañe ‘nadie es profeta en su tierra’. Espero sin embargo que pronto alguna colega reivindique un puesto para las mujeres médicas en la Argentina, obteniendo en la Facultad de Medicina una cátedra, una sala de enfermos en algún hospital, la dirección de un hospital para escuela modelo de enfermeros y enfermeras y un puesto dirigente en las reparticiones de educación.»
(1) Archivo General de Entre Ríos, Fondo Hacienda, Serie XI, Instrucción Pública, Departamento Uruguay, Caja Nº 6, Leg. 3, pp. 152 y vta.
(2) La Opinión de Entre Ríos, Paraná, 19 de marzo de 1889.
Bibliografía
María del Carmen Binda, Romina Silveira, y Cristian Krämer: Cecilia Grierson, la primera médica argentina, en http://www.scielo.org.ar/. Acceso: 9/9/2016,
Alfredo G. Kohn Loncarica, Cecilia Grierson. Vida y obra de la primera médica argentina, Buenos Aires, 1976, pp. 47-48.
Cecilia Grierson, www.elhistoriador.com.ar, acceso: 8/9/2016
Fuente: Genoma
Esta nota fue publicada por la revista La Ciudad el 12/2/2020

Related Articles