Al día de hoy, todos somos conscientes de la importancia de llevar a bordo de una embarcación los chalecos salvavidas. No solo son un elemento de seguridad obligatorio a bordo en cualquier zona de navegación, sino que también deben formar parte del equipamiento indispensable de cualquier navegante.
La normativa de seguridad actual marca el número y tipo de chalecos que se deben llevar a bordo. A partir de aquí su buen uso y mantenimiento dependen de nosotros.
En el mercado podemos encontrar una amplia gama de chalecos salvavidas que se adaptan a los distintos usos y actividades náuticas, desde modelos rígidos tradicionales de espuma a modelos de inflado automático muy cómodos y prácticos para embarcaciones de recreo.
Requisitos de homologación de un chaleco salvavidas
Color llamativo.
Cinchas de sujeción resistentes.
Deben ser capaces de poner boca arriba a un individuo inconsciente para sacarle la cabeza del agua y dejar así las vías respiratorias fuera del agua.
Deben ir equipados con un silbato y con bandas reflectantes.
Tener la flotabilidad adecuada según la zona de navegación para la que sean.
Índice de flotabilidad
El índice de flotabilidad es uno de los datos más importantes a tener en cuenta a la hora de comprar un chaleco salvavidas ya que para poder incorporarlos como parte del equipo de seguridad obligatorio de nuestra embarcación y poder pasar la ITB deben cumplir con los mínimos marcados por la normativa vigente.
Chalecos de 50 N: aprobados en aguas interiores protegidas donde puede recibirse ayuda inmediata. Están recomendados para actividades como la vela ligera, piraguas, motos de agua, etc. Tienen una flotabilidad de tan solo 5 Kg y deben de ajustarse al cuerpo perfectamente disponiendo de diferentes tallas para poder adaptarse correctamente a cada individuo.
Chalecos de 100 N: para embarcaciones de vela y motor que realicen salidas de navegacio?n costera a menos de 5 millas de la costa, es decir, para las zonas 5, 6 y 7.
Chalecos de 150 N: Son los más utilizados en náutica de recreo y son los necesarios para barcos que naveguen en las zonas 2, 3 y 4, es decir, entre 60 y 12 millas de la costa.
Chalecos de 275 N: Son el tipo de chaleco homologado para navegar en la zona de navegacio?n 1, es decir, para navegación de altura. Debido a su gran volumen una vez inflado, dificulta notablemente el movimiento, siendo complicado para la persona que lo porta nadar o subir por sus propios medios a una balsa salvavidas. Para alta mar y condiciones extremas Navegacio?n de altura y uso profesional.
Consejos de usos y mantenimientos
Para darle el uso adecuado y mantener su chaleco por mucho tiempo como nuevo, garantizando asi? su seguridad, se sugiere:
Antes de zarpar, cada tripulante debe tener asignado su chaleco salvavidas y el será responsable de su ajuste, ubicación y cuidado durante el viaje, así como de comprobar su buen estado.
Con tripulación inexperta es vital instruirles sobre su uso.
Hay que saber anticiparse a las situaciones que hacen imprescindible el uso del chaleco. La mejor solución es navegar siempre con el puesto.
Cuando no lo use, no lo exponga al sol por largos periodos. Los chalecos deben guardarse siempre en un lugar seco.
No lo seque sobre un radiador o calentador, la luz del sol o el calor pueden debilitar algunas telas sintéticas y degradar el material de flotación.
Enjuagarlo con agua dulce de vez en cuando para eliminar los restos de salitre que siempre estarán presentes y que pueden dañar el tejido.
Fuente: Elonce.com
Esta nota fue publicada por la revista La Ciudad el 6/2/2023