Más allá de haber sido un año en el que el sector automotriz debió sortear distintas dificultades, como la escasez de stock de algunos modelos importados y las constantes subas de precios, este año la venta de vehículos 0Km creció un 11,32% a nivel nacional, y un 8,07% en Entre Ríos. Así lo confirmó a UNO Ramiro Reiss, gerente general de Haimovich Paraná, que comercializa las marcas Volkswagen y Toyota, quien sin embargo advirtió que las expectativas de ventas para el primer tramo de 2024 no son las mejores, habida cuenta del fuerte impacto en el sector de la última devaluación.
Al respecto, explicó a UNO: “Este año las automotrices pudieron importar partes para producir, y vehículos terminados para vender, pero se quedaron con una deuda muy grande en dólares, ya que el gobierno no les otorgó las divisas que se había comprometido. Eso hizo que ahora, junto con la devaluación y el establecimiento de un aumento del impuesto PAIS, esas importaciones se encarezcan. Sumado a las retenciones a las exportaciones de lo que producen, hace que las fábricas tengan un costo muy importante y que en esta devaluación, que superó el 100%, hayan empezado a trasladar estos costos al precio de las unidades”.
Frente a este panorama, opinó: “La perspectiva, sobre todo para el primer trimestre y cuatrimestre del 2024, no sean buenas, en el sentido de que hay que adaptarse a los nuevos valores de los vehículos”.
Según mencionó, en todo el año 2023 los vehículos 0Km aumentaron alrededor de 160%, y si bien en diciembre la suba de la divisa oficial osciló el 118%, el incremento en las unidades nuevas por ahora fue del 35% en promedio. Al respecto, analizó: “Ahora, con esta última devaluación, que fue de más del 100%, las fábricas han trasladado hasta el momento más o menos un 35%. Esto hace que en los valores de los autos sea un incremento muy importante, pero sigue siendo un buen momento para comprar, porque todavía hay un largo recorrido de aumentos”.
Ante la consulta de UNO, comentó que en la actualidad el valor en el mercado de un automóvil 0Km arranca en casi 11 millones de pesos. Sobre las modalidades de pago vigentes, indicó: “Nosotros seguimos comercializando, obviamente, primero tomando los usados en parte de pago; eso se sigue manejando. Después están los créditos a través de las financieras de las marcas, o los créditos bancarios, que son en cuotas fijas en pesos, donde las tasas de interés, en función de la inflación pasada y la expectativa inflacionaria, son negativas, es decir, están por debajo de la inflación. Pero lógicamente, al ser tasas de tres cifras en muchos casos, el valor de la cuota es alto para la capacidad de ahorro en general de la gente. Entonces ahí es donde aparece, y sigue siendo un instrumento válido y buscado, el sistema de plan de ahorro, que al no tener ningún tipo de tasa de interés, tiene cuotas que son más accesibles, más allá que el valor de las mismas van subiendo en función de que el auto aumenta”.
Sobre esta cuestión, refirió: “En general, en esta coyuntura tan puntual, el nivel de ingresos de la gente venía acompañando en promedio la inflación, y en ese porcentaje venían subiendo los autos lógicamente. Pero en diciembre no fue así, por el shock que generó un salto muy grande de un momento para el otro en los precios. Y los ingresos obviamente no han no se han acomodado a ese aumento”.
No obstante, evaluó: “A uno quizás le impacte el valor que tiene hoy un vehículo, pero todavía va a tener importantes subas, porque todos sabemos que si hubo una devaluación de un 100%, en el caso de un auto que viene importado del exterior el precio va a tratar de llegar ese 100%, sino van a vender a pérdida las fábricas. En esta primera etapa, que no se traslada el total de la devaluación, están perdiendo lógicamente; y también nosotros como concesionarios, porque estamos trabajando con descuentos”.
En este contexto, sostuvo que es una óptima inversión adquirir un vehículo hoy. “Quien tiene un excedente de pesos y busca colocarlos financieramente, hoy no hay muchos instrumentos que le ganen a la inflación, o que puedan rendir un 20%, que es lo que puede haber puede ser la inflación de este mes, por ejemplo. Entonces, para no desvalorizar más sus pesos, comprar un bien de uso que va a subir más, sería una buena alternativa”, subrayó.
Sobre los vehículos usados, precisó que no aumentaron de la misma forma que los vehículos nuevos. “Por ahí los aumentos no han sido tanto. Acá hay que tener en cuenta que el precio de los 0Km es en función del costo que tienen las fábricas para producir o para importarlo; en cambio, al precio del usado lo pone el mercado. Si uno quiere tratar de actualizar el precio del usado a lo que valía en función del 0Km, seguramente no se va a vender a ese valor. Entonces, lógicamente, en estos momentos cae menos la venta del usado que la venta de 0Km porque el precio de los usados no lo subimos en la misma medida que lo que sube un 0Km”, aclaró.
Por último, Reiss destacó: “Las fábricas apuntan a que en un en una determinada cantidad de meses, que obviamente nadie sabe con exactitud si serán tres, cuatro, cinco, seis o más, la gente recupere poder de compra, que se estabilicen los precios, que puedan bajar algo las tasas de interés”.
“Cuando hay estabilidad de precios y de ingresos, y más largo plazo, la venta de bienes de uso como es nuestro caso que son las unidades, siempre mejora, y uno puede planificar cuando la inflación es baja”, dijo a modo de conclusión.
Fuente: Uno Entre Ríos