Una ley del 17 de diciembre de 2014 establece que el 30 de noviembre de cada año se recuerde el Día Nacional del Mate, en conmemoración del nacimiento de Andrés Guacurarí y Artigas, a fin de promover el reconocimiento permanente de nuestras costumbres.
La fecha queda incorporada al calendario de actos y conmemoraciones y el Poder Ejecutivo nacional realizará la más amplia difusión de la celebración, a través de los mecanismos de comunicación oficial.
En tanto por su artículo 3º se invita a las provincias y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a adherir a la ley, generando en el ámbito de sus respectivas jurisdicciones la más amplia difusión a la celebración.
Entre Ríos, una provincia matera sin dudas celebra con los mejores augurios este día.
El mate, costumbre nacional
En la Argentina se consumen 110 litros de mate anuales por persona, sin embargo, su popularidad no se condice con el conocimiento que la gente tiene de esta bebida. Propiedades estimulantes, descongestivas y estéticas de esta yerba. Consejos para cebar el mate perfecto
Según el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), en la Argentina se consumen 110 litros de esa infusión anuales por persona. Y si bien es la preferida de los argentinos, son pocos los que conocen los beneficios de este ícono cultural.
Josefina Armendares es ingeniería agrónoma, paisajista y sommelier de yerba mate de la marca CBSé y enumeró siete bondades ligadas a las propiedades alimenticias, estimulantes y medicinales de esta yerba:
- Tiene un alto contenido nutritivo:el mate aporta vitaminas A, B, C y E, minerales (hierro, magnesio, sodio y potasio) y proteínas ya que posee más de diez aminoácidos esenciales.
- Es estimulante y antidepresivo:la mateína presenta propiedades energizantes y tonificantes. Estimula el sistema nervioso central y promueve las actividades mentales, mejorando el ánimo y la concentración.
- Regula el tránsito intestinal:debido a las propiedades polidextrosas de sus hojas, la yerba mate es diurética, digestiva y optimiza la absorción de nutrientes. Esto mejora el tránsito intestinal y regula el funcionamiento de todo el organismo.
En la Argentina se consumen 110 litros de esa infusión anuales por persona
- Ayuda a la salud cardiovascular:gracias a sus propiedades antioxidantes el mate regula la presión arterial y previene enfermedades coronarias al disminuir los niveles de colesterol «malo» y evitar que las grasas se acumulen en las arterias.
- Ayuda a perder peso:sus propiedades antioxidantes tienen un efecto diurético que evita la retención de líquidos y mejora el desarrollo de la función renal. A su vez, funciona como buen acompañamiento para dietas al generar una sensación de saciedad.
- Es descongestivo y digestivo:en el caso de las yerbas saborizadas, tanto el poleo como el romero son descongestivos de las vías respiratorias y también poseen propiedades digestivas. A su vez, el primero ayuda a calmar la tos.
- Beneficios estéticos:la yerba mate funciona como un tónico, es decir, una sustancia que estimula y fortifica los dientes, y que previene de las caries dentales. A su vez por sus taninos es ideal para aclarar manchas de la piel y reducir arrugas.
Los secretos del mate perfecto
El mate tiene un alto contenido nutritivo (Getty)
Consultada sobre sus consejos para lograr el mejor mate, Armendares hizo hincapié en cuatro puntos esenciales que deben ser tenidos en cuenta.
-Mate: es preferible aquellos que se curan, es decir, los de madera, calabaza o hueso; o incluso los de vidrio recubierto con cuero. Prefiero evitar los de silicona o materiales que le den sabor.
-Bombilla: preferentemente con paletilla ancha que permita hacer ciertas maniobras como sacar yerba.
-Agua: No debe superar los 80°. Se aconseja que no sea mineral sino de grifo, si puede pasar previamente por un filtro para eliminar el cloro mejor.
-Armado: se llena 3/4 partes de su capacidad con yerba, se tapa la boca con una mano y se sacude 3 o 4 veces. Al volver a la posición original se debe dejar la yerba en diagonal dejando un lado del cuenco casi vacío. Ahí se llenará con unos chorritos de agua aproximadamente a 60° hasta que la yerba se humedece e hincha. Se tapa la boquilla de la bombilla y se coloca en ese sector de yerba húmeda, donde se seguirá cebando. Cuando se lavó ese parte se continúa con la yerba seca.
¡Y a matear!
(fuente: archivo entre ríos y https://www.infobae.com)
Esta nota fue publicada por la revista La Ciudad el 30/11/2018