Por Carlos Alberto Negri –
El tema son las opiniones sobre el resultado electoral y sus efectos sobre el futuro, y la catarata de agachadas “tácticas” que se insinúan bajo un manto protestaslacrimógenas, falsas sensateces y falsas racionalidades francamente vergonzosas, no lo tenía tan claro, pero vengo a sostenerque…, de aquí en mas, primero la libertad de Cristina y… si hay que perder, perdamos.
Yo, así, en primera persona del singular, de aquí para adelante solo elegiré entre quienes tengan como primer compromiso electoral la libertad de Cristina.
Y si hay que perder… perdamos.
Es decir, el tipo o la fulana que gane, jura, se pone la banda, agarra el bastón con la izquierda y con la derecha firma el/losindultos, una amnistía por decreto de necesidad y urgencia, un proyecto con amnistía para todos los presos políticos de todas las jurisdicciones y fueros, un plebiscito, una consulta popular, un referéndum, la intervención de todos los poderes de la provincia que no adhiera dentro de las 72 horas, una reforma constitucional, y… los pedidos de informes a los jueces que procediere, ponele, después, busco el mecanismo para volver a llamar a elecciones sin nadie proscripto, y después vemos como sigue.
Y si hay que perder, perdamos,
Puede parecer una cuestión ingenua, primaria, de principios, y lo es, pero es también una cuestión de análisis elemental, si no tenés valor ni potencia para resolver sobre la maraña de sofismas que tienen a tu principal líder presa y proscripta, y encima te haces el boludo, no valés nada, y te van a pasar por encima, a Vos, a todos, cualquiera, sí o sí… ya lo están haciendo…
Y si hay que perder, perdamos.
Podría agregar con fundamento histórico: Perón tenía centenas de juicios, en todos los fueros y jurisdicciones, y le devolvieron la gorra, los sueldos, y ganó, siempre con ese cuarenta por ciento en contra, hubo que pelear 18 años, y hubo también, como ahora, un montón de tácticos sensatos de los que sostenían que había “que estar contra Perónpara salvar a Perón”, nada nuevo bajo el sol…
Y sí, si hay que perder, perdamos.
Además, esos razonamientos de que Cristina no está, en realidad, “tan presa”, que es un “obstáculo” para el peronismo, son, por lo menos, una canallada, primero que esté libre y después, si te tiene harto, ella, el chico, la cuñada, la Cámpora y la mar en coche, elegí a otro…
Ahora, si hay que perder, perdamos.
Yo, siempre en primera persona del singular, he sido duro tanto con Lupín como con Cristina en el poder, lo he analizado, no te muevo ni una coma, pero las injustas prisión y proscripción son ante todo una cuestión de honor y de dignidad individual y colectiva, pero también de estrategia, no proscriben a Cristina, nos proscriben a todos.
Y, bueno, si hubiera que perder, perdamos…
Hoy por hoy los bandos y los valores básicos en juego son los que hay, cierto que falta y mucho pero es tan grave el asunto que, era impensable hace 15 días que fuera tan claro, Mr. Trump, Mr. Bessent, Mr. Rubio, el paisano Netanyahu, Mr. Lamelas, y… los “mercados”…te gritan: es la dependencia ¡estúpido!
Pero bueno… si no convencemos lo suficientey hay que perder, perdamos…
29 de octubre de 2025
