Los resultados de una investigación de la UNESCO y el Centro Internacional Para Periodistas (ICFJ), publicados el 10 de diciembre, en la que participaron más de 900 personas de 125 países diferentes, muestran que el 73% de las mujeres periodistas que respondieron a la encuesta han experimentado violencia en línea en el curso de su trabajo.
El 25% había recibido amenazas de violencia física, mientras que el 18% de ellas habían sido amenazadas con violencia sexual. Sin embargo, la investigación revela que el problema no se limita al ámbito de Internet, ya que el 20% de las mujeres informaron haber sido atacadas fuera de línea en relación con la violencia en línea que habían experimentado.
Durante una sesión que organizó la UNESCO y el ICFJ titulada “Violencia en línea” La nueva línea del frente para las mujeres periodistas” se debatieron los resultados y las periodistas que intervinieron compartieron las experiencias personales de abuso en línea.
Y, una vez más, la desinformación tiene que ver con estos problemas que surgen en línea: el 41% de los encuestados dijeron que habían sido blanco de ataques en línea que parecían estar relacionados con campañas de desinformación orquestadas.
Una de las soluciones que proponen es más transparencia y responsabilidad de las plataformas de redes sociales cuando se dan ataques contra mujeres periodistas. Esta reivindicación cobra importancia al conocer, a través de la encuesta, que Facebook es calificada como la plataforma menos segura, con casi el doble de personas que la califican como “muy insegura” en comparación con Twitter.
A pesar de estos obstáculos a los que deben enfrentarse las mujeres, ellas continúan trabajando y mostrando su fortaleza frente a los abusos. Ahora, más que nunca, debemos seguir luchando para mitigar y erradicar este tipo de violencias en un sector que trabaja para proteger la libertad de los medios.
Puedes consultar el informe a través de este enlace y visionar la conferencia donde se expusieron los resultados en World Press Freedom Conference 2020.
Fuente: UNESCO.org