Por Alfredo Guillermo Bevacqua –
Ernesto Cherquis Bialo escribió una nota magnífica en el portal de Infobae expresando el dolor ante la información que se había dado a conocer. Pero un dibujo y seis palabras de Rep, el dibujante de Página 12, dijeron mucho mas y el dolor en el pecho fue igual de intenso “2018. Primer mundial sin El Gráfico”. Fue demasiado.
Nos preguntamos ¿así progresamos? ¿Así avanza la cultura? Se nos antoja un retroceso enorme. Es un golpe brutal al periodismo gráfico, dado por quienes otorgan prioridad a plataformas digitales, subestimando a una institución capaz de seguir generando millonarias cifras en publicidad. Es probable que de los múltiples negocios del grupo propietario sea la que menos ganancias otorgue, pero es sin dudas la que le ha conferido prestigio y le ha abierto mas puertas que nadie en todo el mundo.
En esta modernidad de la inmediatez, de la rapidez, de las palabras contadas, de mensajes de no mas de 20 segundos, es demasiado complicado tener periodistas que sean capaces de analizar, emitir opinión y hacerlo con la calidad de un literato. Así pasaba en El Gráfico. Desde aquellas “Apiladas” de Borocotó (¿Por qué nunca fueron recopiladas y publicadas en forma de libro?), pasando por el tono implacable y bombástico de las notas de Dante Panzeri, los exhaustivos análisis de Juvenal, las inolvidables notas de Osvaldo Ardizzone o “El Veco”, o la poesía en forma de comentario de partido de tenis o de carrera de fórmula 1, de Carlos Marcelo Thiery.
El Gráfico era una escuela que enseñaba sobre el deporte y sobre la vida. No dejaron que festejaramos su centenario. ES probable que las futuras generaciones no sepan del deleite de hojear “El Gráfico”: Nosotros nos preguntamos quien contará ahora la gloria del deporte argentino; siempre habrá un automovilista que nos entusiasme como Fangio o los Gálvez, tal vez vuelva algún día la magia de Nicolino Locche o un noqueador como Monzón, siempre habrá un Vilas que nos hará soñar, y siempre habrá alguien que nos traerá a la memoria a Moreno, Labruna, Sívori, Rojitas, Maradona o Messi. Siempre habrá alguien que nos hará vibrar. Pero difícilmente nos cuenten su grandeza con tanta belleza, como lo hizo “El Gr´çafico”, a la vez que nos generaba la certeza que todo había sido así. Simplemente, por que lo decían maestros sabios y creíbles.
Solo nos animamos a compartir las palabras de Cherquis Bialo: “No es una revista deportiva que el año que viene habría de cumplir cien años en la vida cultural del país la que acaba de cerrar. Es algo más, es nuestra mejor adolescencia y adultez que se nos va. Es una presencia irreemplazable en cualquier rincón de nuestras casas. Es el amor por el deporte y por la lectura. Es una fuente de credibilidad y sueños. Es una caricia entre padres e hijos al recorrerla juntos. No tendremos más a El Gráfico. Maldita lógica. Maldita evolución de la vida que siempre se lleva consigo algo de nuestro corazón.” Es muy triste la noticia: ha muerto El Gráfico. Tenía 99 años.