Por Alfredo Guillermo Bevacqua –
En mayo de 1974 tres docentes uruguayenses se entrevistaron con el Presidente de la Nación, General Juan Domingo Perón, para invitarlo a los actos del 125 aniversario del Colegio del Uruguay. Fueron los últimos convecinos que hablaron con el mítico líder.
A los que acumulamos juventud, se nos acumulan recuerdos. También personajes entrañables, que se quedan a vivir en el corazón de uno, y nos enorgullece que así sea; es lo que nos pasa, con el profesor Oscar Fernando Urquiza Almandoz. Ciudadano ilustre de Concepción del Uruguay. Miembro correspondiente de la Academia Nacional de la Historia desde hace 49 años. Y es un motivo de legítimo orgullo que un intelectual de su dimensión nos dispense atención y nos revele amistad, aunque nada importante hayamos hecho para merecerla.
Hoy el profesor Urquiza tiene 86 años. Está retirado de su apasionado trabajo de investigador de la historia. Pero sigue leyendo. Sigue estando al tanto de las cosas que pasan.
Lo traemos a colación por un hecho acontecido hace 43 años. En la tecla de la memoria hay que dar play. El video está intacto. Fue una tarde de mayo y soleada. La misa laica que se oficia en el templo de 100×70 había mandado a la sacristía del vestuario a los oficiantes para el descanso. Como en cada domingo , el “profe” estaba en la platea del Núñez. Solo queríamos saber como había sido la entrevista con el General Perón; cómo lo había visto; cuánto tiempo habían estado, que les había dicho. La curiosidad fue ampliamente satisfecha y cuando comenzó el segundo tiempo, uno todavía estaba embelesado con lo contado por ese amante de la historia que había estado con un protagonista de la Historia. Todo fue así.
El 28 de julio de 1974 el Histórico Colegio del Uruguay celebraba sus 125 años, ya que fundado en 1849 por el General Justo José de Urquiza, siendo el primero, laico y gratuito, de nuestro país. Se conformó una comisión de homenaje, que decidió invitar a los actos conmemorativos al Presidente de la Nación, Teniente General Juan Domingo Perón, al que el pueblo había elegido con el 63 % de los votos para que por tercera vez ocupara el cargo. Para formular la invitación se formalizó un pedido de audiencia y se nominó a los privilegiados responsables de hablar con el Presidente.
Era ministro de Educación, el Dr. Taiana, a quien contactó el entonces Rector de la Universidad Nacional de Entre Ríos, Dr. Miguel Angel Marsiglia, para facilitar el trámite. La audiencia fue concedida.
La delegación se integró con el profesor Miguel Angel Gregori, rector del Colegio del Uruguay; el profesor Roque María Galotto, presidente de la Comisión de Ex Alumnos y representante de la Comisión de Festejos y el profesor Oscar Fernando Urquiza Almandoz, como representante del cuerpo docente de la institución.
Allá fueron. Los recibió personal de Presidencia que los condujo por las entrañas de ese Palacio en el que se ha desarrollado y decidido mucho, o casi todo, en el último siglo. Llegaron a una antesala del despacho, tomaron asiento y les indicaron que aguardaran un momento que “el Presidente enseguida los atendería”.
El profesor Galotto, les dijo “mirá si se abre esa puerta y aparece Perón”. Gregori y Urquiza, se mostraron incrédulos; estaban demasiados expectantes y ansiosos ante la posibilidad de hablar con quien era, sin dudas, el argentino mas importante del siglo XX.
El que con sus brazos en alto y su aparición en el mítico balcón, del que estimaban estaban a corta distancia, convocaba sueños de multitudes. Muy pocos minutos después la puerta se abrió, y, efectivamente, apareció la figura imponente del General, que con su sonrisa inconfundible, los invitó a pasar.
El profesor Gregori, como rector del Colegio, era quien debía formular la invitación. El General les preguntó desde donde habían viajado. Cuando le nombraron la ciudad, expresó : “Ah, cuando era joven y estaba destinado en Paraná, algunos fines de semana nos íbamos en tren a Concepción del Uruguay, porque había muy lindas muchachas…”
En apenas tres minutos el profesor Gregori, explicó el motivo de la visita y manifestó el deseo de contar con la presencia presidencial en la celebración; el rector, ceremoniosamente, expresó que no deseaban demorarlo mas, y el General, les dijo: “¡Cómo se van ir ya! Vamos a tomar un café”. ¿Cómo negarse a tomar un café con Perón? Y, distendido, conversó sobre sus esperanzas, los proyectos, su fe en el pueblo argentino y hasta dejó un elogio para el coronel Damasco, que era Secretario General de la Presidencia de la Nación.
El profesor Miguel Gregori, era docente e investigador de historia, el “profe” Urquiza lo es; tal vez pensaron dialogar de historia, y el anciano general que de historia sabía mucho, les hablaba de su confianza en el futuro, como si el futuro no hubiera sido casi siempre una incertidumbre; no imaginaba que había sido capaz de cometer el imperdonable pecado de ser mortal, y que apenas un mes después de esa charla, en un infausto mediodía, su corazón, fatigado de luchas, le hizo sellar un pacto con la eternidad.
Fue un encuentro que duró exactamente 27 minutos, hace 43 años. Días pasados lo recordamos con “el profe” Oscar Urquiza Almandoz; él un apasionado investigador de la historia, conserva el privilegio de ser el último uruguayense en hablar con un argentino, protagonista y bisagra de la historia, pero –increiblemente- también del presente.
(Ahh!… ¿El partido? Era por el viejo Torneo Regional. Ferro, de Concordia, le ganó 3 a 2 a Gimnasia. El partido de las cédulas de identidad, pero esa, es otra historia, menuda, tramposa…)
(fuente: La Calle)
Esta nota fue publicada por la revista La Ciudad el 28/5/2017
