EconomiaNacionalesPolíticaSociedad

Se triplicó el consumo de carne de cerdo en los últimos 15 años. La situación en Entre Rios.

carne de cerdo en chuleta ene 2018Los cambios de hábito y el aumento del precio de la carne bovina fueron los factores primordiales que llevaron el consumo de 5 a 14 kilos. 

Un trabajo de Coninagro revela que en Argentina existen más de 100.000 unidades productivas, con un stock de 5,1 millones de cabezas y 962.000 madres.

En la última década, el consumo de carne porcina ganó espacios de manera progresiva, y de acuerdo a estadísticas públicas y privadas cerró 2017 con un consumo anual por habitante cercano a los 14 kilos.

Para explicar esta situación existen dos factores. Por un lado, se debe analizar desde el cambio de hábito en el consumo y el aumento del precio de la carne bovina. A este hecho, se suma un sector que realizó fuertes inversiones en infraestructura, incorporó genética y mejoró sus números productivos.

Un informe elaborado por el Inta da cuenta de esta evolución, y señala que frente a los casi 14 kilos anuales de consumo, hace 15 años esta cifra se ubicaba sobre los 5 kilos. “En este período, el consumo total porcino se incrementó un 196 por ciento, cubierto por una producción nacional que creció un 205 por ciento “, remarcó el documento.

Entre los factores que impulsaron este escenario favorable, destacan precios y disponibilidad de carnes frescas, aumento de consumidores. También resaltaron ítems como ampliación del plantel de madres y mejora de índices productivos.

De acuerdo a Coninagro, la entidad que nuclea a las cooperativas argentinas, en Argentina existen más de 100.000 unidades productivas registradas por Senasa. En conjunto, los establecimientos cuentan con un stock de 5,1 millones de cabezas y 962.000 madres. La misma fuente señaló que en los últimos 7 años, nuestro país duplicó la producción de esta carne, que pasó de 280.000 en 2010 a unas 565.000 toneladas estimadas para 2017.

Desde hace dos años, uno de los temas que preocupa a esta cadena de valor son la apertura de las importaciones, que ha duplicado su registro en este período. El principal proveedor es Brasil, seguido por Dinamarca, España y Canadá. A este listado podría sumarse Estados Unidos, y desde las entidades que representan a estos productores advirtieron sobre el riesgo de introducir en Argentina el Síndrome Respiratorio Reproductivo Porcino (PRRS por sus siglas en inglés).

¿cómo cerró el año en Entre Ríos?

La Cámara de Productores Porcinos de Entre Ríos difundió un informe haciendo un balance con puntos a favor y otros en contra. «El precio del capón no bajó en todo el año, pero tampoco superó la inflación», dijeron. Aquí, el texto completo.

El 2017 fue un año con altibajos, con los problemas estructurales de siempre, vinculados con la incapacidad de los gobiernos en materia infraestructura o bien su voracidad fiscal, que se traduce en pérdida de competitividad de los productores. Pero, a su vez, con condiciones económicas mejores que 2016 y con un crecimiento en producción y consumo del 8% a nivel nacional. La expectativa del organismo es que el consumo se consolide y continúe creciendo, tomando más posición en la dieta diaria. Por esto y otros aspectos que favorecen al desarrollo productivo, se sigue apostando por la campaña de promoción del consumo y por el aumento de la eficiencia en cada granja.

Por un lado, el precio del capón no bajó en todo el año, lo que no es menor, pero tampoco superó la inflación, dado que apenas creció un 4,6% entre enero y diciembre. Por su parte, el precio de los cereales también fue conveniente, con lo que la ecuación económica no fue negativa como durante gran parte de 2016.

No obstante, tampoco fue un año excepcional. A pesar de los cuestionamientos y propuestas que vienen realizando todos los sectores productivos de la provincia, persisten las dificultades con los caminos. La infraestructura provincial sigue pegando muy duro y castiga fuerte el esfuerzo que se hace día a día para ser más eficiente.

Asimismo, las importaciones siguen creciendo y terminan impactando negativamente en el mercado, por factores comerciales y sanitarios. Fundamentalmente, la compra de determinados cortes, como la bondiola, generan distorsiones significativas, perjudicando a toda la cadena, además de ser cortes hechos con herramientas productivas diferenciales como la ractopamina, aquí prohibida. Al respecto, el gobierno debería permitir competir en igualdad de condiciones con los vecinos brasileños.

Por último, el peor mes del año para el sector porcino fue diciembre -paradójicamente el mes en que el precio debería tocar su pico máximo-. La doble reforma tributaria -nacional y provincial- golpea duro al sector. A nivel provincial, la suba de ingresos brutos en un 50% es, como se dijo, fulminante. Subir de esta manera el impuesto más distorsivo de la economía es una decisión incomprensible. Mientras tanto, a nivel nacional, la baja del Impuesto al Valor Agregado (IVA) -que debería ser beneficiosa para la cadena- perjudicará al sector primario, ya que no prevé la forma para que sean devueltos los saldos a favor de IVA que se generarán por las inversiones ni por el giro comercial. Basta con ver la experiencia de la agricultura para conocer lo nefasto que ha sido esta política impositiva para un sector.

(fuente: http://www.aimdigital.com.ar y El Entre Rios)

Related Articles