Para el Instituto Argentino de la Energía, el «inusual descenso» tiene como causas la caída del PBI, la baja de los ingresos reales de los hogares y el aumento de precios. Se redujo el porcentaje de importación energética y aumentó la exportación.
La demanda de energía eléctrica, gas natural y combustibles líquidos experimentó un «fuerte y homogéneo retroceso» en los últimos 12 meses como resultado de la recesión de la economía, de acuerdo al informe mensual del Instituto Argentino de la Energía (IAE).
La demanda eléctrica disminuyó en agosto de 2019 un 2,2% respecto a igual mes de 2018, y en el acumulado de los últimos 12 meses la caída respecto al año precedente es aún mayor de 6%, informó la entidad que preside el ex secretario de Energía, Jorge Lapeña.
En gas natural la demanda residencial en julio de 2019 tuvo una caída altamente significativa del un 9,7% menor que en julio de 2018, y en el acumulado de los últimos 12 meses el descenso fue de 5,5%.
En tanto, la demanda agregada de gas natural de los sectores residencial, comercial, y entes oficiales disminuyó en el último año un 4,2%.
En cuanto a los combustibles líquidos, la nafta disminuyó en los últimos 12 meses un 5,3% respecto al año anterior; el gasoil tuvo una caída en la demanda en los últimos 12 meses del 5,3 %, y el conjunto ponderado de nafta más gasoil disminuyó un 4,8 % en el último año.
Para el IAE, el «inusual descenso» de los indicadores de consumo energético tiene como causas «la caída de la actividad económica ( PBI), combinado con la caída de los ingresos reales de los hogares y el aumento de precios de los productos de la canasta energética«.
El informe destacó que la combinación de «una reducción de la demanda con un valor que se ubica cercano al 5% en promedio y el incremento de la producción de hidrocarburos que crece un con un valor medio aproximado del 4,6%», repercutieron en una mejora de la balanza comercial energética.
«Estos efectos combinados permitieron realizar una reducción del 32,5% de la cantidad de importaciones energéticas, y en un aumento de exportaciones del 20%», destacó el informe.
De ese balance surge que en el periodo enero-agosto el déficit comercial energético haya sido de 424 millones de US$, considerablemente inferior a los 2.457 millones de US$ del mismo periodo de 2018.
(fuente: https://www.baenegocios.com)