Un informe de IARAF detalló que erogaciones perdieron peso en el PBI. Los rubros con más recortes fueron salarios y prestaciones en seguridad social.
Debido a las caídas reales exhibidas en los intereses de la deuda (-52,7% respecto al 2019 y -15,8% respecto a 2020), el gasto primario se mantuvo constante en términos reales respecto al 2019 (-0,02%) y creció en mayor cuantía que el gasto total respecto al 2020 (6,1%), detalla el informe de IARAF.
“Al considerar el ratio gasto total – PIB en perspectiva, se observa que el ratio del 2021 es el más bajo desde el 2013, y que el máximo de la serie que va de 2005 al 2021 corresponde al 2017, en contraposición a lo ocurrido en nación, que alcanzó el máximo en 2015. Por su parte, el ratio gasto primario – PIB correspondiente al 2021 alcanzó el 15,85% del PIB, siendo el valor más bajo desde 2012 y al igual que para el caso del gasto total el máximo se alcanzó en el año 2017”, analiza el trabajo elaborado por Nadin Argañaraz y María José Nieto.
Si se observa la variación real respecto al 2019 (último año prepandémico) por componente del gasto, las partidas que crecieron fueron la inversión financiera, bienes y servicios y las transferencias corrientes en torno al 41,8%, 12,9% y 11,8%, respectivamente.
Por su parte fueron los gastos en personal, prestaciones de la seguridad social, inversión real directa y transferencias de capital, los que se redujeron en términos reales, en torno al -5,3%, -5,6%, -5,7% y -9,9%, respectivamente.
La reducción del gasto en personal fue la partida más significativa por su gran participación en la estructura del gasto (43,7% en 2021) alcanzando los $179.867 millones constantes de 2021, informó IARAF. Al gasto en personal lo siguen en importancia la reducción en las prestaciones de la seguridad social que alcanzan los $55.195 millones, las transferencias de capital por $57.188 millones y la inversión real directa que cayó $8.546 millones constantes de 2021.
Por el lado de los ingresos, el consolidado de las 24 jurisdicciones percibieron recursos por $7.634.495 millones en el 2021. Ello significa incrementos nominales del 116,1% y del 60,6% respectivamente, lo que equivale a un crecimiento real del 2,5% respecto al 2019 y del 8,2% respecto al 2020.
Dada la evolución mencionada de los ingresos y de los gastos, el 2021 cerró con un superávit primario y fiscal para el consolidado de provincias y CABA de $264.684 millones y $89.230 millones, respectivamente. Cabe destacar que se trata del cuarto año consecutivo con superávit primario para el consolidado de jurisdicciones provinciales, mientras que es el primer año desde 2010 en que hay un resultado fiscal positivo.
Fuente: Ámbito
