Por Susy Quinteros –
Esta nota puntualiza un tema de gran actualidad deportiva. Trataré de analizar algunos aspectos que explican, por qué en el fútbol – el deporte con mayores seguidores del mundo-, los jugadores profesionales sufren reiteradas lesiones que los mantienen alejados de las competencias. Según los informes recogidos obedecen a los siguientes aspectos: preparación de base, nutrición, distribución de cargas, frecuencia de partidos, recuperación sicofísica y de lesiones, jugadores en tránsito, el dinero, el stress las tensiones y los medios de comunicación.
Salvo pocas excepciones, los niños tienen en general, una deficiente formación física escolar. La falta de cultura alimentaria de nuestra población es otro motivo importante que incide en esta problemática y afecta también a los deportistas de alto rendimiento. La alimentación es el carburante necesario para poder sobrellevar las exigencias de un esfuerzo sostenido.
Actualmente, estamos en un período en donde el acento fundamental del entrenamiento está puesto en el aumento de la potencia. Para mejorar esa cualidad se trabaja en musculación. Si las cargas son muy elevadas y los jugadores no tienen esa estructura de base ya mencionada, no se completa correctamente el ciclo del desarrollo de la fuerza y aparecen las lesiones. Hoy el fútbol es muy agresivo, se necesitan hombres fuertes y muy sólidos para poder soportar tantas fricciones.
La invasión de los medios y de la televisión en el fútbol y el gran negocio que ella implica, trae como consecuencia el aumento del número de competencias. Los jugadores tienen hoy una exigencia mucho mayor, (Copa Libertadores, Argentina, Sudamericana, Liga Argentina de fútbol y Copa Mundial entre otras,) Antes, en esas competencias, participaban sólo los clubes que obtenían el primer lugar en sus respectivos campeonatos locales, pero a partir de la incorporación de nuevos equipos se incrementó el número de fechas a jugarse. Un futbolista de muy buen nivel que integra un equipo importante y además el seleccionado del respectivo país, juega aproximadamente 80 partidos por año con una frecuencia de un partido cada 4 días. Ante tanta exigencia, debe haber una buena muy buena coordinación de trabajo entre todos los especialistas a cargo. La alteración de su vida cotidiana, más la presión de los empresarios que tienen fuertes intereses, provocan en el jugador una carga emocional que sumados al desgaste energético producido por el stress y al desgaste físico de los entrenamientos y las frecuencias de los partidos, producen en muchos casos frecuentes lesiones que se ven en el fútbol actual. Esto ocurre no sólo en nuestro país sino también en el fútbol internacional, por eso hay una gran preocupación en los dirigentes del fútbol de alto rendimiento que fueron modificando los programas de entrenamiento y la rotación de entre el director técnico, el preparador físico y el médico, los especialistas, que trabajan para lograr el mejor rendimiento físico y la eficiencia técnico-táctica.
Los jugadores profesionales ingresan muy jóvenes y tienen sobre sus espaldas una gran carga: ganar el campeonato, no defraudar a los hinchas, rendir de acuerdo a las expectativas. Por otra parte, la multiplicidad de los medios de comunicación de la actualidad, ahogan al jugador. Están encima, se los discute, se los juzga y conocen todo lo que hacen incluso en su vida privada. Esta situación, repercute en el entorno familiar y en las amistades, y se convierte en otro factor de alteración del equilibrio emocional. El dinero modifica también su vida cotidiana. La presión de los empresarios que tienen fuertes intereses sumados al desgaste energético de los entrenamientos y las frecuencias de los partidos, avalan esas frecuentes lesiones que se ven en el fútbol actual. Esto ocurre no sólo en nuestro país sino también en el fútbol internacional, por eso hay una gran preocupación en los dirigentes del fútbol de alto rendimiento que fueron modificando los programas de entrenamiento y la rotación de los jugadores en cada partido.