La pandemia afectó a todos los sectores económicos pero no en igual medida. Tal es el caso de la industria del juguete que si bien tuvo un año difícil, por el aislamiento, registró “una buena demanda de juegos y juguetes”, señala Emmanuel Poletto, presidente de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete, entidad que agrupa a 180 fábricas del país.
A continuación los principales aspectos del dialogo mantenido con Ámbito.
Periodista.: Estamos por culminar el año, ¿en qué situación se encuentra la industria del juguete?
Emmanuel Poletto: Para la industria argentina del juguete fue un año difícil porque las fábricas permanecieron cerradas durante gran parte del ASPO. La actividad industrial y comercial se reinició tras lograr la aprobación de protocolos sanitarios. Más allá de las dificultades que provocó la pandemia, hubo buena demanda de juegos y juguetes durante el aislamiento por la permanencia de niñas y niños en los hogares y el mayor tiempo libre durante el aislamiento social.
P.: ¿Cómo evalúa la situación de las jugueterías, saben si hubo muchos cierres?
E.P.: No se han reportado cierres de jugueterías. La pandemia ofreció una ventaja para los comercios que ya tenían su canal e-commerce desarrollado. A modo de ejemplo, los juegos de mesa se ubicaron en el puesto 14 de los 50 productos más vendidos en Latinoamérica durante la cuarentena en el principal market place de la región, seguidos en el puesto 29 por los juegos y juguetes (+25%), rompecabezas en el puesto 34 con un incremento del 23% y muñecas en el Nº 48 del ranking con un aumento del 18%. Lamentablemente, en Argentina ese canal lo tenían desarrollado sólo las grandes cadenas de jugueterías, supermercados y casas de artículos para el hogar mientras que los pequeños comercios tuvieron que reconfigurar la dinámica de su negocio y empezaron a vender por Whats-app, Instagram, EstoyCerca.app de FECOBA y otras redes sociales.
P.: ¿Cómo está la competencia con el juguete importado?
E. P.: Durante el presente año se liquidaron los stocks que dejó la recesión iniciada en 2018, con una fuerte participación de productos importados que hacia fines de 2019 explicaban el 70% del mercado argentino del juguete y dejaban a la industria nacional con sólo el 30% de participación. De acuerdo con las importaciones registradas en los meses enero-septiembre del corriente año, se puede observar una reducción del 40% en KG Netos y del 65% en valores FOB respecto al mismo período del año 2019, acumulando un total de 6,76 millones de Kg Netos y u$s FOB 38,4 millones.
Si bien en términos absolutos registraron menores volúmenes, las importaciones de juguetes mantuvieron el dinamismo de 2019 respondiendo a los aspectos de las temporadas, si comparamos los volúmenes importados en el mes de septiembre, podemos notar una reducción del 39% con relación al mismo mes del año pasado (-48% en agosto).
El 2020 es un año de transición en el cual se están liquidando stocks de juguetes importados, luego de los altos volúmenes de importación que hubo en el período 2016-2019 donde prácticamente se habían duplicado las importaciones de juguetes en un contexto recesivo. Para el 2021, el objetivo de la industria nacional del juguete es recuperar el 51% del market share.
P.: ¿Tienen faltantes de insumos? ¿Cuáles?
E.P.: Sí, en los últimos meses las petroquímicas oligopólicas están limitando el abastecimiento de material plástico, principalmente polipropileno y polietileno, que es el principal insumo de la industria del juguete. Debido a las dificultades para abastecerse de insumos no es posible utilizar actualmente la totalidad de la capacidad instalada, pero esperamos que una vez que se normalice la situación la industria nacional del juguete recuperara los niveles de producción que se tenían hasta el año 2015, cuando la mayoría de las fábricas operaban 24 horas.
P.: ¿Cómo les afectó la suba del dólar?
E.P.: Los insumos se compran con el valor del dólar oficial, que ha tenido una variación similar a la inflación, por ende no ha sido mayor el impacto. Sí ha habido aumentos en dólares de la materia prima plástica, lo cual es injustificado y ha complicado a toda la rama de producción nacional.
P.: ¿En cuánto se incrementaron los precios de los juguetes?
E.P.: Los precios a salida de fábrica de los juguetes nacionales se incrementaron 40% respecto a la temporada de fin de año del 2019.
P.: ¿Cuántas empresas del sector tuvieron que recurrir a ATP?
E.P.: Al principio del ASPO la mayoría de las fábricas recurrieron a los programas de apoyo impulsados por el Gobierno, como el ATP y los créditos al 24% para el pago de sueldos, las facilidades respecto a las contribuciones patronales y la moratoria impositiva. Con el correr de los meses y al mejorar las ventas los fabricantes pudieron hacer frente al pago de salarios sin recurrir al ATP.
P.: ¿Hubo despidos y quiebras en el sector?
E.P.: Durante el presente año no.
P.: ¿Cuánto vendieron para el Día del Niño respecto el año anterior y el mes anterior?
E.P.: Se registró un incremento de las ventas del 1,3% que lograron revertir la caída en los primeros meses del aislamiento preventivo, por las dificultades de las ventas a distancia. Los descuentos y el aumento de transacciones con el Programa Ahora 12 que permitió financiar en 3, 6, 12 y 18 cuotas, ayudaron a dinamizarlas ventas de juegos y juguetes para el Día del Niño.
P.: ¿Cuáles son las expectativas para Navidad, Reyes y el año que viene?
E.P.: Somos optimistas en que las ventas podrán sostenerse, gracias a los planes de financiación con Ahora 12 y a los descuentos y promociones habituales para la temporada de Navidad y Reyes.
Fuente: Ámbito