Por Jorge Bonvin –
Eterna discusión, si el fútbol de ayer o el fútbol de hoy. En esta contraversia se aplica como en ningún lugar aquella famosa frase de “todo tiempo pasado fue mejor”. Es indudable que el fútbol ha cambiado desde muchos aspectos. Podemos mencionar EL ECONOMICO, por ejemplo. Hace unos años el mejor del mundo era Diego Maradona y valía 16 millones, hoy lo es Leo Messi y vale 700 millones.- Pero también han cambiado los estadios, las canchas donde se juegan los partidos, los hinchas, sobre todo en nuestro país donde no se acepta simpatizantes visitantes. Los técnicos han ido tomando cada vez mayor incidencia, cada vez son más importantes y hoy se cotizan, algunos, a precio de los mejores jugadores del mundo, como si fueran los que hicieran los goles.
Otra cuestión que hoy se tiene como muy importante es la presencia del periodismo, enorme cantidad de programas que analizan desde todos los puntos de vistas los partidos, y que con el afán de no repetirse en sus opiniones, trata de dar los más increíbles análisis cayendo muchas veces en pavadas importantes. Gente que con el diario del lunes, sin haber pateado una pelota, dicen saberlas todas. Sin contar a esa nueva creación, los “periodistas partidarios”, impresentables personajes que no dejan que nadie hable mal del club al que defienden.
Hasta la numeración de las camisetas ha cambiado. Antes uno iba a la cancha y veía el número 7 y ya sabía en que puesto jugaba, ese era el puntero derecho, hoy es muy fácil encontrarse con que en el equipo titular juega el 34, el 25 o como pasa en Europa donde juega el 99.-
Pero más allá de estas diferencias financiera y sociales, la esencia del fútbol cambió?. Sobre este tema fija posición un lector amante del fútbol, realizando una encendida defensa del fútbol de antes, donde jugarlo parecía más sencillo. Aquí la damos a conocer y nos parece dado el tema tan controversial, no va a ser la última:
Algunas consideraciones divagadas después de escuchar al seleccionador nacional Sampaoli resolver con 11 jugadores la cuadratura del círculo.
¿No hay nadie que la haga corta? ¿Por qué complicar algo que es tan simple como hacerlo bien? O sea, darle la pelota a alguien que tiene una camiseta igual a la tuya, que éste elija el mejor posicionado de sus compañeros, que están ya dispuestos a recibir la pelota, pues se han ubicado en un lugar donde son visibles y están desmarcados o marcados pero tienen habilidad y carácter suficiente para sacarse su marca de encima, y el receptor de esta opción, que fue la mejor considerada, ya tiene un compañero designado para pasarle la pelota, siempre avanzando hacia la valla contraria, y éste no ha de volver la pelota hacia atrás, además de ser una mala señal es una porquería…salvo raras ocasiones.
¿Dónde se origina esta sinrazón? Cuando se perdió el potrero, el campito, la canchita… y se empezó a escuchar “táctica y estrategia” (que es positiva bien utilizada, sin entrar en delirios). Primero con Zubeldía, y luego con seguridad y convencido; creo que el gran mal del fútbol argentino y el comienzo de su estado actual es Bilardo que creó monstruos periodísticos que lo endiosaron sin tener la menor idea de lo que es “entrar al área con la pelota dominada”, bueno, tan así no es, hay seguramente quien no ha pasado por esta situación y sabe de fútbol.
Dante Panzeri fue un periodista al que la mayoría de sus colegas respetaban y reconocían, quizás por temor, como pasa hoy en día con algunos personajes de los medios, este buen hombre decía que el fútbol era la “dinámica de lo impensado” si, dinámica: es la parte de la física que estudia a los cuerpos en movimiento, además yo diría humildemente “dinámica de lo impensado y del riesgo” porque siempre hay en una jugada improvisada un riesgo físico o de perder la pelota.
Ahora, cuando dejó de estar vigente esta frase? Cuando dejamos el potrero, el campito, etc. Hoy no se ve a nadie que recibiendo la pelota de espalda al arco rival, se de vuelta y lo encare al rival, o lo engañe dejando pasar la pelota o la pise elegantemente dejando mínimamente a su rival pagando, o amague seguir con la pelota dominada y lo haga pasar de largo frenando a cero con su pie sobre la pelota, eso es improvisar de lo que Panzeri hablaba, es hacer lo impensado por el rival corriendo el riesgo de perder la pelota pero al riesgo hay que correrlo ya que es parte de tratar bien el juego.
Es una verdadera pena que un deporte tan apasionante como el fútbol, esté tan “desapasionado”, si no sentís pasión por el fútbol, no juegues, no es matar ni quebrar a nadie, es sentirse en un estado superior al ser humano común que te ve desde afuera, que te alienta, que te insulta, que te manda a no se dónde y uno se siente que es todo en uno, hinchas, jugadores, casi inexplicable.
Qué quedó del Huracán del flaco Menotti, del Santos de Pelé, de Roma, Silvero y Marzolini, Simeone, Rattín y Orlando…como dice el tango “todo ha muerto, ya lo sé”
Los responsable de esta malaria han sido en primer lugar sin duda algunas los Directores Técnicos, el periodismo y los dirigentes. Los otros días miraba a Z. Zidane en una entrevista y decía que cuando el director técnico tiene igual o más protagonismo que los jugadores “ahí estamos en problemas”.-
De los periodistas, no se de alguien de ellos en la discusión Maradona-Pelé/Pelé-Maradona haya dicho que Brasil en Suecia 58, Chile 62, México 70, sin Pelé igual ganaba el mundial, afanaba o no, pero lo ganaba y que Argentina sin Diego Maradona no ganaba México 86. También escuche a uno de estos tipos decir que en México Maradona jugó mal uno o dos partidos… Qué ignorante! Por el solo hecho de entrar a la cancha Diego, el rival se veía psicológicamente disminuido y seguro que por lo menos 3 de ellos estaban asustados y con un rendimiento pobre.
¿Hubiera hecho el Santos la campaña que hizo sin Pelé?… Tenía un cuadrazo, pero no me animo aseverarlo, ganaba siempre 4-3, 5-2 y 7-4, le hacían goles, pero siempre hacia más, ahora de lo que si estoy seguro que el Napoli jamás hubiera hecho la campaña que hizo sin “el 10”. Diego fue y será el más grande futbolista de todos los tiempos.-
Luis “Judio” Bevacqua
