El Presidente admitió ante la Corporación América que necesita del “aporte activo del sector privado” para sostener su programa y prometió que enfocará lo que resta de gestión en “generar condiciones para crecer”.
En un auditorio colmado por referentes del establishment, Milei insistió en que su proyecto sólo puede sostenerse con la adhesión explícita del sector privado. “Por eso necesitamos más que nunca de la participación activa de empresarios y demás exponentes del sector privado”, expresó el Jefe de Estado al pedir apoyo para las medidas que prepara la Casa Rosada.
El mensaje se dio en un contexto de tensiones por la recesión prolongada y las dificultades que atraviesan las pymes, efecto directo del ajuste que impulsa el Gobierno. En ese marco, el pedido presidencial sonó más a ruego que a convocatoria, reforzando la señal de debilidad política que asoma en la antesala del tramo final de su gestión.
Milei buscó transmitir que la etapa que viene tendrá como eje la reactivación, aunque evitó precisar medidas concretas más allá de su habitual apelación a la desregulación plena de la economía. Frente a un empresariado que reclama estabilidad y reglas claras, el Presidente intentó mostrarse dispuesto a “profundizar el rumbo” pese al desgaste y las críticas crecientes.
El encuentro cerró con gestos formales de acompañamiento, aunque sin compromisos públicos de inversión. La incógnita queda ahora en si el respaldo que Milei implora alcanzará para sostener un programa que, hasta aquí, se sostiene más por disciplina fiscal que por resultados económicos palpables.
(fuente: Política Online)