El presidente Alberto Fernández designó a Verónica Gómez al frente de la Oficina Anticrrupción, el organismo que se ocupa formalmente de “la prevención e investigación de la corrupción y la formulación de políticas de transparencia”.
La llegada de Gómez sucede luego de la salida de Félix Pablo Crous de la OA, confirmada en diciembre. El organismo fue noticia en estos años principalmente por la decisión del funcionario saliente de bajarse de todas las querellas de las causas penales por corrupción, muchas de ellas donde fueron involucrados exfuncionarios.
Gómez es exlegisladora porteña y asesora en la Defensoría del Pueblo de la Ciudad. Se trata de una dirigente cercana al vicejefe de Gabinete, Juan Manuel Olmos, con quien mantiene una buena relación desde que coincidieron en la Legislatura de la Ciudad.
La OA se encarga de investigar y perseguir casos de corrupción política en el ámbito de la Administración Pública Nacional centralizada y Descentralizada.
Además, es la encargada de velar por la prevención e investigación de aquellas conductas que se consideren comprendidas en la Convención Interamericana contra la Corrupción, reglamentando sus funciones y atribuciones en el Decreto 102/99, modificado parcialmente en el Decreto 226/2015 donde se quitó la obligatoriedad de ser abogado para encabezar la Oficina Anticorrupción.
Gómez, flamante titular de la OA,, es una abogada que desarrolló su carrera en diversos ámbitos de la esfera pública: fue Directora General de Empleo y Capacitación del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Hasta la actualidad, se desempeñó como Asesora en materia de derecho constitucional, derechos humanos y género en la Defensoría del Pueblo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Gómez también fue legisladora por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde se desempeñó como Presidenta del Bloque del Partido Socialista (2005-2009) y cumplió funciones como Asesora en la Cámara de Diputados de la Nación.
Fuente: Política Argentina
