El crecimiento de la actividad industrial continúa a pesar de las desaceleración en los meses de enero y febrero, impulsados principalmente por la producción automotriz, que atravesó cambios en su modalidad de pagos para no interrumpir la productividad en las plantas. Así también lo percibieron empresarios nucleados en la Unión Industrial Argentina (UIA), en un relevamiento que expresó sus expectativas de crecimiento para el 2023.
Finalmente, la producción de bienes de consumo no durable casi iguala (-0.2%) el nivel de actividad de los dos primeros meses del año pasado, mientras que los bienes de uso intermedio acumulan un recorte de 2.1% en el mismo período del 2022. Entre este tipo de bienes, el avance de la producción de minerales no metálicos, las industrias metálicas básicas y la refinación de petróleo compensan la caída en la producción de los químicos y plásticos.
Fuente: Ámbito
