“Todo es escritura, es decir fábula (…) Nuestra verdad posible tiene que ser invención, es decir escritura, literatura, pintura, escultura, agricultura, piscicultura, todas las turas de este mundo”. Julio Cortázar, Rayuela, Cap. 73
Vivir durante una pandemia como nunca antes y permanecer en cuarentena y aislamiento a muchos nos hizo cambiar hábitos, costumbres, maneras de aprender, de comprar hasta los víveres y de comunicarnos, en fin. En vez de la presencia cara a cara, lo habitual ha sido durante meses ver el rostro nuestro y el de otros colgados de una pantalla, en un collage de caras con fondos diversos. El estupor, la angustia, el miedo, el cansancio, el desconcierto como un río crecido ocuparon muchos de nuestros espacios cotidianos. Por suerte, tuvimos arte para disfrutar, compartir, nutrirnos y poder sentirnos vivos dentro de escenarios que se asocian a relatos de una ficción distópica. Más que nunca hemos necesitado de la música, el cine, la literatura, la pintura, del arte en general.
En ALQUIMISTAS 222 hemos extrañado las reuniones semanales, las clases de yoga, los encuentros de los participantes de los talleres de modelado escultórico, vitrofusión y mosaiquismo, teatro, escritura. Pero no arrasó con todo y todos la pandemia. Seguimos, aunque de otro modo. Hubo talleres on line de creatividad, encuentros virtuales para leer y escribir, grupos de WhatsApp para seguir en contacto. Si bien no tenemos oportunidad de reunirnos para la muestra de trabajos, para leer y para cantar a fin de año en el patio lleno de verdes, de flores y de magia de la casa de Lita Mardon –sede de ALQUIMISTAS 222-, desde el taller de lectura y escritura creativa que coordino en ese espacio cultural, compartiremos algunos de los textos de sus integrantes, alumbrados en otras tardecitas de taller donde leíamos, nos escuchábamos, escribíamos.
Nos acompañarán artistas plásticos de nuestra ciudad, que con mucha generosidad y excelente predisposición, han decidido embarcarse en esta aventura .
Esta propuesta tiene la pretensión de volver a hacer visibles, desde la virtualidad, algunas de las expresiones artísticas que a nuestro alrededor suceden. Muchos de nuestros vecinos escriben, dibujan, pintan, trabajan la arcilla, se dedican a la fotografía. Y aquí nos reuniremos cada martes para mostrar lo que se hace en esa búsqueda incesante por encontrar huecos donde respirar en medio de la adversidad. Es simplemente una muestra de ese hacer por el arte, que es un hacer por la vida, un intento de hacer más llevadera la contingencia de nuestro existir.
Agradecemos a Rodolfo Oscar Negri, integrante del taller, por el espacio gentimente ofrecido en La Ciudad Revista.
Marga Presas
Coordinadora del taller de lectura y escritura creativa de ALQUIMISTAS 222